Cuando se domina este principio, se posee un valioso escudo que te protegerá bien a través de todos los oscuros valles por donde tengas que pasar.
Es posible ver las estrellas desde el fondo de un pozo profundo, en tanto que no puede distinguirse desde la cima de una montaña. De la misma manera, aprenderás de las adversidades, cosas que no habías descubierto jamás sin dificultades.
Siempre hay una semilla del bien, solo debes encontrarla y hacerla prosperar.
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